VUELTA A LA CARGA! (ESP)

Por suerte o por desgracia en el mes de agosto no puedo hacer más de una semana de vacaciones. Mi trabajo me obliga a estar siempre a disposición de lo que pueda ser y estando a tope de trabajo y al hacer las vacaciones por turnos, con poca gente todo el mes, sólo me queda para mí la semana del 15, que siempre queda cortada por este día festivo y hace que en los polígonos no pase ni el aire, lo que te permite desconectar un poco y disfrutar de unos días libres. Sólo una semana. Hay que aprovecharla y la afronto siempre -si no nos vamos de viaje- con una larga lista de cosas por hacer:


Decidí que pedalearía mucho y empecé con un fin de semana bici 100% haciendo el sábado 5 horitas de alta montaña disfrutando de los senderos entre Espinal, Roncesvalles y San Jean Pied de Port, el domingo de un tirón hasta Logroño siguiendo el Camino de Santiago y el resto de la semana disfrutando de los caminos espectaculares del Cap de Creus con la btt y las pequeñas carreteras de el Alt Empordà con la “flaca”.

Decidí correr un poquito (poco) y he andado buscando nuevos caminos interiores alrededor de San Pere de Rhodes y he hecho trotando el camino de ronda, subiendo desde Roses, con más tranquilidad que no lo había hecho nunca, contemplando con calma las calas, sentado sobre una piedra justo los segundos necesarios para sentir el momento y darme cuenta de la suerte que tengo, incluso la suerte que ha supuesto la lesión en la rodilla, que  ha hecho darme cuenta de lo poco importante que es mi dolor y la de cosas buenas que sacaré de ello.

Decidí nadar en el mar y al final incluso me he hecho amigo de alguna medusa y he conseguido no odiar tanto el gusto amargo que te deja en la boca.

Decidí escribir mucho y he enlazado muchas más palabras de las que finalmente he publicado.

Decidí leer mucho, y quizás no lo he hecho tanto como pensaba, pero ha caído más de uno.

Decidí estar en familia y creo que han llegado a aburrirse de mi ... todavía un poco más.

Decidí saltar con paracaídas e incluso eso he cumplido, y conmigo Júlia.

Decidí comer mucho y bien (y no he engordado porque he quemado más de lo que he entrado), pero lo he hecho y hoy comemos en el Toc al Mar de Santi y Sandra en Aiguablava, el toque final y de calidad a esta semana.

Aún así, siempre te queda algo de la lista por hacer, y es que una semana no da para todo. Decidí que descansaría mucho y ... Ups, eso no he tenido tiempo de hacerlo. Pero no importa, eso ya lo haré y en paz cuando me pongan en la caja de madera.

Pero finalmente, como todo, las vacaciones también se acaban. He dejado por unos días la crisis en el trabajo. Una crisis que mañana volveré a afrontar cara a cara y que todavía me debe hacer sufrir mucho y de la que aún tengo que aprender muchas cosas, buenas y malas. He disfrutado de unas vacaciones cortas pero aprovechadas, apretadas. Vividas. Y es que si te lo propones todo puede ser positivo e intenso, incluso una sola semana de vacaciones.

Intenso por todo lo que he hecho.

Positivo, porque lo que he hecho me ha hecho feliz.

Y es que todo se resume viviendo y transformando los momentos en instantes irrecuperables, como el que siento ahora mismo, que tengo hambre y sé que es el momento de dejar el portátil y salir a la terraza a desayunar, viendo cómo sale el sol sin preocuparme de nada más que alimentar el cuerpo con pan con tomate y el espíritu con la calma del movimiento del agua a esta hora.

Y mañana, vuelta a la carga!